En medio de la espesa vegetación se escucha el ruido de una máquina retroexcavadora. Proviene del estero Miguel, en la comunidad Alajita. Está en la parroquia Selva Alegre, de Eloy Alfaro (norte de Esmeraldas).El pesado vehículo ingresó el pasado 17 de noviembre por la madrugada, para extraer oro. En esa comunidad, de 52 familias, varias máquinas fueron destruidas con dinamita el 21 de mayo. Así, un grupo de militares ocupó las minas y las cerró. En San Lorenzo y Eloy existen 800 familias dedicadas a la minería.

Pero los mineros volvieron a agruparse para seguir con la actividad extractiva, pese a la prohibición declarada por el Gobierno. En Alajita hay agujeros que tienen la forma de grandes cráteres, llenos de agua de color verde y azul. Algunos están cubiertos con una espesa capa verde. Por los pequeños senderos, en medio del follaje, están las huellas frescas de las máquinas que trabajan en la zona. Los habitantes dicen que no denuncian a los mineros por temor a ser agredidos. Ni siquiera los guías de la zona se atreven a acercarse a las minas. “Si usted quiere arriesgar su vida hágalo”, dice uno de ellos. “Algunos están armados y son peligrosos”. Por eso tampoco se puede dialogar con los mineros en la zona. La máquina que llegó al estero Miguel acabó con parte de la vegetación. El conductor tuvo que abrir un camino para facilitar el trabajo de minería. En un costado se colocaron alargadas manqueras, que sirven para tomar el agua del estero y lavar el oro. La mina está a un kilómetro de la vía principal que conduce a los cantones Eloy Alfaro y San Lorenzo, donde también hay campamentos. “Ellos dicen que son legales y que tienen permisos. Pero se esconden en las montañas para explotar el oro”, dice un morador del sector Playa Nueva.En un sobrevuelo realizado por el jefe del Comando de Operaciones Norte de Esmeraldas, Fernando Noboa, se constató la presencia de maquinaria pesada en Angostura y Alajita. Los campamentos de este último sector están a unos dos kilómetros del destacamento de Infantería de Marina, encargado del control en la zona. Ahí hay 30 oficiales. Cuentan con un solo vehículo y dos lanchas para el patrullaje. Tienen a su cargo el control de las comunidades mineras de Chaplita, Picadero, Alajita, Nueva Brisa, Chanusal, Palmareal, Playa Nueva y Angostura; todas son parte del Alto Santiago (río).“La Boca del María, Colón Eloy y Maldonado también están afectadas por la extracción del oro”, dice un habitante de Maldonado. Según él, la prohibición declarada por el Gobierno no ha tenido efecto. “El agua de los ríos Santiago, Ónzole y Cayapas es turbia porque el trabajo ilegal de la minería no se ha detenido”.El presidente de la Asociación de Pequeños Mineros del Alto Santiago, Mérice Caicedo, indica que no se referirá al tema hasta que se firme el convenio para la explotación con la Empresa Nacional Minera. La institución tiene en concesión 18 000 hectáreas en el norte de Esmeraldas.Una moradora de la comunidad Alajita manifiesta que por la contaminación del río Santiago (con mercurio, plomo y otros) no se puede utilizar el agua. El Municipio de Eloy Alfaro llevaba el líquido vital cada dos días, pero desde hace dos semanas no lo hace. Ellos se abastecen de pequeños pozos construidos en los patios de sus casas. La mujer cuenta que por consumir el agua del río su hijo se enfermó. Tuvo que gastar USD 52 en los medicamentos, para calmar los dolores de estómago. Fue atendido en el hospital de Borbón.“El trabajo que ha generado la minería no compensa los efectos en la salud de las familias”, agrega otra mujer. Ella es habitante de Chanusal y también fue minera. Después de clases, tomaba la batea (un recipiente de madera) y buscaba el oro en un estero cercano. Ganaba dos pepas de oro al día. “Mucha gente pudo hacer sus casitas, pero están muriendo con las enfermedades adquiridas”.La ayuda estatalTras  el cierre de las   minas en Esmeraldas, se  creó la Misión Luis Vargas Torres, comoplan de ayuda para los habitantes. La Misión  atiende con obras a 20 000 personas de 57 comunidades  La Misión  ha  logrado organizar a 10 asociaciones de mineros. Está previsto entregarles maquinaria (40  máquinas gabimétricas)   y asesoramiento. En San Lorenzo y Borbón  se invierten USD 4 millones en escuelas, baterías sanitarias...FUENTE: EL COMERCIOFECHA: 23/11/2011